Los grandes del 2010: Twin Shadow

El 2010 ya se va y junto a él todas esas cosas que quisimos hacer y no pudimos por falta de tiempo, dinero o fuerza de voluntad; viajes, compras, aprobar ese odiado curso, mandarte a esa personita que te quita el sueño, levantarte a las 6 am para correr... o postear más seguido en tu blog, claro. Bueno pues, es hora de cambiar. Este año no puede acabar sin que les hable de un monstruo musical que reventó la blogósfera con infinidad de publicaciones acerca de su peculiar estilo. Su debút, Forget, parece confirmar la nueva tendencia: lo retro está pegando fuerte. Y es a mí a quien más duro golpeó, a la persona que se olvidó de que alguna vez existió una década donde las personas bailaban sin cesar bajo relucientes bolas discotequeras. Gracias a Twin Shadow la cadena se completa y yo también puedo decir ¡que vivan los 80's!


Me sumo a todos las listas de "los mejores discos del año" y afirmo que George Lewis Jr. ha creado, sin lugar a dudas, uno de los mejores del 2010. Un disco que es una abierta invitación al baile, proponiéndole a nuestro cuerpo que dibuje afiebrados movimientos un sábado por la noche. El bajo y la batería se vuelven a entender a la perfección, como en sus años mozos, regalándonos la pista perfecta para sacar a brillar nuestros mejores pasos. A la fiesta también ha sido invitado el teclado, quien desde el fondo del escenario se encarga de completar la atmósfera con sus difuminados sonidos. Llega el hombre; copete a lo travolta, lentes oscuros y pantalones acampanados. Brillo por doquier. Junto a él, la voz, profunda y grave, afinada para la ocasión. Canta y perdemos el sentido; nos convertimos en pequeñas máquinas movedizas, imparables, en medio de una fiesta donde el new wave y la música disco son los amos y señores.

No nos queda más que rendirnos a esa extraña habilidad que Twin Shadow utiliza para hacer que lo retro sea el eje de nuestra movida musical más actual, logrando que gloriosos sonidos de pasadas épocas suenen a presente. Nadie he hallado que cree ese pedazo de tiempo en que ochentas y dosmiles parecen ser lo mismo. Ahora me siento mejor, este año no acabará incompleto.

LO MEJOR DEL DISCO:

TETHER BEAT


SLOW


La descarga se encuentra disponible en el Facebook del blog.

Una tranquila desesperación: Pink Noise


Un nombre que es a todas luces una contradicción ya me pone a pensar acerca del posible estilo que esta banda de israelitas radicados en Nueva York me puede ofrecer. "Ruido rosa" se hacen llamar y es la primera vez que me los cruzo. ¿Puede existir un ruido que evoque tan apacible color? me pregunto, y la portada del EP "Here Is Happiness" me intenta responder con una imagen que me perturba en cierta manera. Una chica que a pesar de ser rosa me refleja un aura oscura, enigmática y cautivadora. Las negras líneas que caen de sus ojos, nariz y boca la hacen ver más misteriosa, como si el negro de su interior se rebalsara por los orificios de su rostro. Hay algo ahí... algo magnético.

Escucho el primer track y lo veo: el rosa está ahí. Pero, rayos, se me hace difícil describirlo... Es algo extraño; desde el primer momento se percibe una atmósfera densa pero que no está sobrecargada, como si las contadas notas que emiten las cuerdas fueran suficientes para transmitirnos una incontenible desesperación, una intranquilidad que, cómo negarlo, me resulta tan atractiva. La simpleza de sus líneas melódicas y las tres o cuatro notas que repiten las guitarras en cada tema me quiebran la calma, no sé por qué, pero me retumban en la cabeza, me ponen nervioso... hacen demasiado ruido.

De pronto, pequeños ruiditos como de juguete de bebé, acompañados por una voz femenina de lo más shoegaze que parece flotar en medio del ennegrecido ambiente acrecentan mi locura, me hacen parar con todo lo que estaba haciendo: han capturado mi atención. Y es que no me explico cómo esas tonadas tan inocuas y hasta a veces infantiles pueden llenar de ruido mi habitación; son sonidos suaves, tranquilos... no tienen derecho. Nunca me había topado con algo así, ni en mis más fieras pesadillas; es algo absolutamente único, ese algo con apariencia delicada y sutiles formas que esconde un secreto, una belleza que enferma, que trastorna, pero que no puedes dejar de observar... es un silencio incómodo, una apacible demencia: es un ruido rosa. Y es que para gritar no es necesario abrir la boca.

LO MEJOR DEL DISCO:
REDWOODS






Pink Noise - Dive - Live @ vibromonk studios from Yuval Ziegler on Vimeo.



La descarga se encuentra disponible en el Facebook del blog.

The Decemberists - The King Is Dead


Los Decemberists son un grupo del que siempre vale la pena hablar, pues sus propuestas siempre entregan algo diferente. Esta vez no fue la excepción y con "The King Is Dead" los estadounidenses le rinden un homenaje a sus raíces, a esos extensos pastos y a los arroyos del pueblito que los parió. Y qué mejor forma de hacerlo que convertir una granja de su natal Oregon en su estudio de grabación, donde, alejados de las peripecias de una vida moderna, lo único que resta por hacer es ser genuinos. La calidez de la Pendarvis Farm se puede sentir en cada track del sexto disco de estudio de los decemberists, donde los típicos instrumentos de la americana y el country se conjugan para enseñarnos cómo es la vida campirana en tierras del tío Sam; harmónicas, cuerdas acústicas, panderetas y corazón: una justa mezcla de libertad.

Este disco ciertamente toma un rumbo distinto al que los estadounidenses habían seguido con The Hazards of Love -uno de los últimos alientos del progre conceptual en nuestros días-, dejando atrás todo resquicio de sobreelaboración y la gran carga de complejidad que trae consigo elaborar un armatoste progresivo. Así como lo arman, lo desarman, y tranzan algo de esa apoteosidad con que nos narraban la historia de un par de amantes por viento en la cara, sol y paz. Está claro pues: los decemberists no son banda de un solo matiz; fieles a lo que su arte les indica, hacen lo que les nace, sea blanco, negro o gris, esperado o no. Esta vez, su arte quizo ser feliz, y para ello no hay lugar como el hogar.

P.D.: El disco tuvo como influencia principal a REM, tanto así que Peter Buck, su guitarrista, participó en tres canciones del The King Is Dead. Una de ellas es, precisamente, una de las mejores del disco a mi parecer:

LO MEJOR DEL DISCO

ROX IN THE BOX

5 ESTRELLAS

DOWN BY THE WATER


THIS IS WHY WE FIGHT


La descarga se encuentra disponible en el Facebook del blog.

Solar Bears - She Was Coloured In




El viajero espacial tenía la misión de explorar el planeta Osa Solar por un tiempo establecido, donde se verificaría la información recolectada acerca de dicho astro recién descubierto. Atractivo no solo por sus refulgentes colores, sino también por la gran expectativa de lo que en él se hallará, estaba en la boca de todos. Se especulan bastantes formas de vida.

En el día de su arrivo, el viajero nos hizo llegar la siguiente hoja de su bitácora. Él nunca volvió.


LO MEJOR DEL DISCO



La descarga se encuentra disponible en el Facebook del blog.

Owen Pallett - A Swedish Love Story (EP)



ESTE ES UNO DE LOS POSTS QUE TENÍA PREPARADO PERO QUE NUNCA LLEGUÉ A POSTEAR POR X,Y,Z MOTIVOS. DE TODAS MANERAS, UNA OPINIÓN ADICIONAL NUNCA ESTÁ DE MÁS, Y SI ES ACERCA DE UN BUEN DISCO, MEJOR.


El pop barroco está sonando fuerte y ahora su vocero es Owen Pallet con su nuevo EP, "A Swedish Love Story".


Luego de experimentar la fusión de instrumentos clásicos con sintetizadores que nos regaló el último LP de Sufjan Stevens, Owen Pallet nos brinda su propia versión de lo que es el pop barroco. Según él, no hay mejor idea que cerrar los ojos y trasladarnos a un cuento de hadas o, una que otra vez, formar parte de una leyenda en el bosque, cargada de personajes de corazón valiente, en un medioevo que no conoce de las complejidades actuales. Cual noble caballero, Pallet desenvaina su fiel espada de cuatro cuerdas y la afila una y otra vez, teletransportándonos así a un sinfín de escenarios donde podemos saludar a Zelda o, incluso, charlar un rato con Cloud o Tidus. Una prudente batería y una suave voz completan el viaje.

"A Swedish Love Story" es una de esas pequeñas muestras de regalo que te obsequian en alguna tienda para que pruebes la calidad del producto. Con sus cuatro temas, este pequeño EP es la muestra perfecta de la esencia de Owen Pallet, una esencia parecida al agua de la eterna juventud, que emana júbilo en múltiples formas, colores y sabores. Ahora ya sabemos qué contiene el pomito de Potion X en Final Fantasy.

LO MEJOR DEL DISCO
A MAN WITH NO ANKLES



La descarga se encuentra disponible en el Facebook del blog.

Gracias, Mago de Oz


A veces las cosas encajan de manera perfecta. Quién diría que cancelarte el concierto que más esperabas no podía producir algo más que mierdas y carajos; y claro, en ese momento me peleaba con mi puta suerte, esa maldita que en el sorteo me dio un país donde en aquel entonces no se apostaba por la música. La música... yo no sabía nada de ella. En ese entonces yo recién empezaba a conocerla; el niño que se sentía grande por escuchar ruido había descubierto el santo grial. Y fue gracias a ellos, los que ahora llamo jinetes del verso, los cinco valientes que regalan paz a manos llenas. En aquellos días yo no tenía este blog... pero las cosas parecen encajar perfectamente a veces. Ahora sí lo tengo, y junto a él, la gratitud inexplicable que uno siente cuando hay gente que se dedica a que el mundo sea un milímetro mejor. ¿Cómo no dedicarle entonces unos minutos a ellos que llevan dedicando más de 20 años, 17 discos, cientos de canciones, toneladas de arte a hacer de este mundo el paraíso prometido? Imposible pues. Acá mi homenaje, hombres de fe, que creen en la vida incluso cuando muchos desean negarla.

Los últimos dos días han valido la pena. Han valido quedarse sin almuerzo y cena, hacer horas de cola, correr, sudar, dejar el estudio: mandar todo amablemente a la mierda. Perdí el alma el 23 de noviembre, cuando contados y sagrados metros cuadrados se transformaron en un lugar de La Mancha de cuyo nombre no quiero acordarme. Eran pastos verdes, cielo despejado y soleado, y los colores se abrazaban en arco iris; allá, atrás, el molino, el gigante que esta vez no sería enemigo. Era un pedacito de Gaia que aún no había sido profanado, uno de los pocos que quedan. De pronto, este cobró vida y se oyó su palpitar: el latido de Gaia. Junto a su profundo retumbar, la diosa de la Tierra nos daba la bienvenida, acompañada de sus más leales escuderos, Txus, Mohamed, Carlos, Frank y José, y nos preparaban para contarnos una vieja leyenda que, a pesar de los años, no muere. De pronto se hizo de noche y comenzaron con furia, recalcándonos que los días de ira no habían acabado y que era probable que no acaben nunca; tan rápido como nos saludaba, Gaia se despedía de nosotros, herida y agonizante por obra y gracia de nuestra raza, y es que tres discos para hacernos entrar en razón no son suficientes para resarcir toda una vida dedicada a la destrucción. Llegaban Dies Irae, Satania, Fur Immer, y la épica Gaia: un bombazo de realidad.





Pero la noche sería más. Desde acá, los españoles irían alternando cachetadas de realidad con borracheras, fiesta, empujones de esperanza, frases de ánimo y alegría por doquier. Vendrían los momentos de goce, en los que con vodka, blues, fuerza y honor, el viento soplaría a nuestro favor; juerga medieval, rondas alrededor de una fogata libertina: el Mago más pilas de la noche.









Era la fiesta más pagana de todas, donde hasta los muertos celebraban y desde la posada nos invitaban a brindar junto a ellos; una noche en donde el león cobarde no encontró lugar. Esa noche el cuerpo aguantó la descarga que los hijos de la Finisterra soltaron sobre nosotros, rodaron cabezas y el fuego danzó, alegre de ver cómo sus héroes se entregaban por completo. Esa noche, aquella mítica noche, no se olvidará jamás, y con la tinta de un clavel se leerá por siempre, como un capítulo más en las aventuras del flacuchento Quijote, el mejor puto capítulo que su mente demente pudo imaginar. Y se escribió acá, en la tierra a la que Txus pidió perdón, la que fue, es y será siempre la tierra de Mago de Oz.

El 23 de noviembre perdí el alma, la dejé paseando por Chamberí y de vez en cuando la ven en Las Ventas; va penando en toda Hispania y recorriendo los mil y un bares, rogando ver a sus ídolos nuevamente para brindar con ellos por la libertad. Va una semana y todavía sigo sintiendo al despertar que el sueño es la realidad; no puedo evitar inflar el pecho cada vez que esas palabras tan perfectamente sabias me dan lecciones de vida. Sus melodías se han convertido en el soundtrack de mi día a día, y sus letras, en los mejores consejos; ahora me da pena ver la naturaleza morir, el agua desperdiciarse, el aire oscurecer y no soporto dejar pasar un segundo sin vivirlo al máximo. ¡¿Qué mierda me ha pasado...?! Quizá todo se resuma a ese momento en que les estreché la mano, cuando sus autógrafos y sus fotos solo daban cuenta de lo auténticos que eran. Mientras algunos imponen condiciones y aman a sus fans "de lejitos no más", ellos los citan en un bar del centro de la ciudad, se piden un par de cervezas y por unos momentos se convierten en tus amigos. "Gracias hermano, gracias por el conciertazo de anoche" le decía a Frank mientras lo abrabaza, justo luego de tomarme la más genial de las fotos junto a la voz más cabrona de la música en español... Y es que los verdaderos héroes son así. Gracias, hermanos, gracias Mago de Oz.



Hello Seahorse! - Lejos, No Tan Lejos


Y vaya que había llegado a pensar que la música de gringos no iba con mi lengua, hasta que una señorita con pinta de todo menos de extraordinaria cantante me rompió el estereotipo. Ja! Como si una joven con apariencia tímida y cándida no pudiera formar parte del mejor disco en español que el 2010 ha parido. Estúpidos prejuicios.

Se hace llamar Lo Blondo y ya había tenido la oportunidad de hablar de ella y de su séquito de acompañantes. Recuerdo haber criticado uno de sus temas que en aquél entonces me hacía pensar que el indie en español seguiría esperando por su Mesías; pero, vaya, quién iba a pensar que el cuarteto de mexicanos tuviera la capacidad de evolucionar años luz y perfeccionar su música de manera tan precisa. Pero, ¿cómo han logrado que ese nombre que hace unos años era una tontería -y que les caía a pelo- ahora suene a respeto? He aquí la respuesta, poseso:

PASO 1: Oscurece
Empieza a tocar más acordes menores y que los instrumentos bajen sus revoluciones. Añade sintetizadores y deja que creen su oscurecida atmósfera. Ah, verdad, agrega un piano, te salvará la vida.

PASO 2: Compón mejores letras
El español puede sonar delicioso si sabes entenderlo. Letras maduras y con sentido, sin complicar las palabras; solo deja que salgan del corazón. Excelente letra la de "Velo de Novia".

PASO 3: Trágate una sirena

O un jilguero, si se te hace más fácil. En "Lejos, No tan Lejos" Lo Blondo ha explotado bien su voz; ha demostrado todos los recursos que es capaz de usar sin dejar esa dulzura característica. Qué voz... una más del club de Antony Hegarty.



Un disco en el que los Seahorse han optado por agregarle peso a la atmósfera y reemplazar un poco de pop por algo más de indie. Se puede decir que ahora suenan más introspectivos, pero más que eso, suenan a madurez. Suenan a una gran banda. Tan solo si se cambiaran de nombre...


LO MEJOR DEL DISCO


La descarga se encuentra disponible en el Facebook del blog.

Sufjan Stevens - The Age of Adz

Son las 3 am y Sufjan Stevens se ha despertado exaltado: ha soñado con electricidad. Tal y como está escrito en los mandamientos del músico estadounidense, toda idea que en sueños surja, se convertirá en música. Y así fue... Stevens tomó barro y forjó una criatura con vida propia... quizá la más impensada creación del universo musical; un híbrido que, al sexto día, ya se podía llamar mundo. Era The Age of Adz.


Sufjan ha decidido enchufar su pop barroco y lo ha evolucionado, haciendo que los violines y demás acompañantes clásicos se entremezclen con actuales sintetizadores, tomando prestado del trip hop, el r&b y la electrónica. Pero ¡cómo rayos pueden fusionarse vertientes tan separadas y seguir sonando bien! La respuesta está en canciones como "Too Much", "I Walked" o "Vesuvius", e incluso en la infinita "Impossible Soul" (25 minutos de todo menos aburrimiento) donde el multiinstrumentalista se luce y deja en claro que, para él, mezclar agua con aceite no es nada del otro mundo. Como hacer que Mozart se siente frente a una caja de ritmos... increíble.

Pero Sufjan tenía que tener algún defecto y es que él no puede concebir una canción sin que la palabra apoteósica sea una de sus características. En The Age of Adz la cosa no podía ser diferente y es interesante ver como Stevens quiere forjar nuevas maravillas en cada tema, haciendo uso de TODO cuanto esté a su alcance. Él es un buen barroco pues, y nosotros se lo agradecemos.

LO MEJOR DEL DISCO:

TOO MUCH



I WALKED



VESUVIUS


La descarga se encuentra disponible en el Facebook del blog.

The Clientele - Minotaur


Minotaur no es una pieza fácil de definir. Uno al escucharla parece identificar rápidamente el hilo conductor de las ocho piezas que la conforman: una dulzura casi infantil, un arrullador cuento de las buenas noches. Algo más que relajante, diría yo, con esas tonaditas que parecen saltar de un xilófono de juguete o de ese juego colgante que nunca pudiste alcanzar desde tu cuna. Algo lindo, me hubiera atrevido a decir... hubiera... si es que, por ratos, el niño al que parecía haberse dirigido el séptimo disco de los Clientele no hubiera crecido de pronto.

El infante parece experimentar una adolescencia temprana cuando, a los 2:18 de "Jerry" y, con más intensidad a los 2:32, la tranquilidad mecedora que hasta el momento colmaba la canción fuera interrumpida a fuerza de guitarra y batería. Luego de 43 segundos, el niño regresaría a su condición, asustado, pero atraído a la vez por lo que había experimentado. La oportunidad le llegaría nuevamente con el tema "No. 33", el término excluido dentro de Minotaur. Un tema cuyo entristecido piano parece contradecir a todo lo que hasta el momento habíamos escuchado. El tema siguiente y su eterno y tétrico monólogo parece confirmar lo que ya hemos inferido: el niño había crecido a la fuerza y aprendió que ya no se podía ser tan feliz.

Quizá los Clientele se sientan así, como adultos que extrañan ser niños y que darían más de un LP por volver a a esa etapa donde uno no se preocupaba por vivir. Todos tenemos un niño adentro, sobre todo si nos llamamos Alasdair MacLean.

LO MEJOR DEL DISCO:
JERRY



NOTHING HERE IS WHAT IT SEEMS



PAUL VERLAINE




La descarga se encuentra disponible en el Facebook del blog.

Sufjan Stevens - All Delighted People (EP)

Que se atreva alguien a contradecirme, negando que Sufjan Stevens es uno de los grandes del pop barroco; que se atreva a hacerlo luego de escuchar uno de los pedazos de música más inspiradores de este año (y del último lustro, década, siglo y centuria). Nadie lo hará, porque cuando se siente que en un disco están contenidos todos los pasajes de una vida, no queda más que agradecer y desear larga vida a su creador. Ese es el caso de "All Delighted People", el más reciente EP de Sufjan Stevens.


Sufjan Stevens, el prodigio americano que toca tantos instrumentos como dedos tiene en las manos, se levanta un día con una idea en mente y no para hasta materializarla: un día soñó con electrónica y en poco tiempo ya teníamos "Enjoy your rabbit", su segundo LP; otro día, leyendo la Biblia, se preguntó que resultaría si le agregara música a sus múltiples pasajes, y así nació "Seven Swans". Para navidad, le provocó hacerle un regalo al mundo con "Songs for Christmas" y ahora, en "All Delighted People", el motor es "homenajear al apocalypsis y al tedio de la vida". Y por suerte -o por su talento- lo ha logrado. En ocho temas, el estadounidense nos la pone clara: la vida es eso, un gran apolcaypsis, tedioso, cansado, molesto, pero que nadie, tarde o temprano, rechazaría vivir.

Apoteosidad en la voz de un Stevens conmovido y un coro que engrandece, "All Delighted People" llega para hacernos sonreirle a la vida, tal como lo hacen los personajes de la carátula. Toda la gente encantada de vivir, que levanten la mano. Yo ya lo hice.

PREPARANDO EL TERRENO PARA "THE AGE OF ADZ", EL NUEVO LP DE SUFJAN. EN BREVE, LA RESPECTIVA RESEÑA.

LO MEJOR DEL DISCO:

ALL DELIGHTED PEOPLE



La descarga se encuentra disponible en el Facebook del blog.

Röyksopp - Senior

¿Qué es un röyksopp? Pues, citando declaraciones de la banda, la palabra hace referencia a la nube con forma de hongo producida por una explosión atómica. Si has escuchado los trabajos anteriores del dúo europeo, notarás que su nombre no está tan lejos de su estilo: una explosión de synthpop que deja más que satisfecho; pero, si es tu primera vez con ellos, con el disco que te presento ahora te parecerá todo lo contrario. Los noruegos de Röyksopp han decidido pintar la otra cara de la moneda; es su oportunidad de demostrar que se saben mover tanto en explosiones como en aguas calmas, emulando tanto la alegría y vitalidad de un "Junior" como la seriedad y la experiencia de un "Senior". Parece que lo han logrado.

Dos palabras: introspección e hipnotismo. La primera de ellas es la esencia del disco, la que convierte en atmósfera cada uno de los rincones de un alma pensativa que se decidió a liberar sus fantasmas. Svein Berge y Torbjørn Brundtland han arriesgado con su cuarto LP el buen nombre que se venían formando desde su debút -allá cuando el nuevo milenio cumplía su primer año-, dejando en la banca al omnipresente sintetizador y las voces, y haciendo por primera vez música que no se baila. Le han apostado todo a su número cuatro y, ¿sabes?, qué bien se siente ganar. Han ganado por esa otra palabra con la que describí a "Senior", esa cualidad que me impide dejar de poner "repeat" al disco. Escuché el primer sonido y no paré hasta el último, sin despegar el oído del parlante, cosa que, si mal no recuerdo, me había pasado tantas veces como lectores tiene este blog. El dúo ya lo anunciaba al decir que esta producción explotará las atmósferas, misteriosas y envolventes como pocas, hipnóticas como ninguna, añadiendo otro matiz a su forma de hacer música y obligándome, así, a llamarlos mi grupo favorito de electrónica.

Atrevidas son las bandas que se animan a cambiar confort por posible éxito mutando su estilo inesperadamente, pero más atrevidas aún son las que se animan a no hacerlo, sobre todo cuando ya van en su tercer o cuarto LP. Felizmente, cuando apuestas por éxito y triunfas, ganas más que eso: ganas tu nombre escrito en piedra, indeleble para siempre. He aquí un ejemplo de eso.

LO MEJOR DEL DISCO:

TRICKY TWO


La descarga se encuentra disponible en el Facebook del blog.

Arcade Fire - Ready to Start (video)

Solución acertada la que los canadienses más indispensables de nuestros días le han dado a una muy difícil tarea (al menos para mí): encontrar las imágenes exactas para reproducir lo que una canción tan perfecta como esta hace sentir. Y es que, cuando una sensación vale más que mil imágenes, no puedes optar por cantidad. Así nos llega el video de "Ready to Start", donde Butler y compañía, teñidos de blanco y negro, y en pleno concierto, nos gritan que están listos para empezar, revelándonos al mismo tiempo lo que sienten: pasión. Pasión por la profesión a la que pocos son convocados y que menos aun eligen seguir. Menos mal que ustedes eligieron bien, chicos.


Arcade Fire - Ready to Start from Merge Records on Vimeo.



"YOU WERE ALWAYS READY TO START, ARCADE FIRE"

Mathew Dear - Black City

Que la electrónica haga el amor con lo experimental y saldrás tú, Mathew Dear. Enciérrate en tu estudio por un par de años, que las máquinas, los circuitos, los bips y los instrumentos sean tus únicos amigos. Así, crearás Black City.


Acuérdate que provienes de la escena avant-garde estadounidense, pues te será necesario para crear tu quinto LP, un disco interesante de mucho más que electrónica. Tendrá glitch, un género nuevo por estas tierras, que hace referencia a sonidos incómodos que, en otros contextos, parecieran ser fallas de los artefactos electrónicos que usas para crear música. Normalmente reducirían la calidad de tus pistas, pero te llamas Mathew Dear y contigo harán lo contrario: están a tu merced, tú los controlas. También tendrá microhouse o "house minimalista", suerte de ritmo donde dos o tres objetos emiten dos o tres sonidos y los repiten dos o tres millones de veces, exactamente hasta el infinito y más allá.

Experimental y microhouse a la vez, ¿un divorcio a todas luces? No; te llamas Mathew Dear, recuérdalo, y, en tus manos, ambos son la ecuación perfecta. Dejarás que las cajas de ritmos entones su única línea, y, justo antes de que alguien piense en monotonía, quebrarás la bien aprendida atmósfera por lo que la inspiración te dicte. Confía en tu inspiración, ella nunca huye. Con ella, sacarás música de cualquier lugar e irás agregando capa tras capa, cada una más atractiva que la anterior. Por último, agrégale esas voces ditorsionadas, dispersas, por ratos oscuras y tenebrosas como el título de tu creación. Parecerán ir en contra de una música dance como la que tú elaboras, pero, ¡rayos!, eres Mathew Dear y en ti las contradicciones sí tienen sentido.

LO MEJOR DEL DISCO:
YOU PUT A SMELL ON ME



LITTLE PEOPLE (BLACK CITY)




SOIL TO SEED




La descarga se encuentra disponible en el Facebook del blog.

The Superimposers - Sunshine Pops!

Aún hay bandas que le hacen justicia a las tres letras que más rehuye quien escribe estas líneas. Pop aléjate de mí. Una de ellas es The Superimposers y gracias a su último disco entendí que esas tres letras pueden ser sazonadas para ser más que eso.

Dos hombres, británicos, mecánico de autos y pescador, Dan Solo y Miles Copeland, quienes luego de educarse en avant-garde y en lo que parece ser un compilado de Bowie, The Beach Boys y alguna que otra banda popera de los 60's, se juntan y cambian de profesión. Sacan dos discos, debút homónimo, sucesor de nombre Harpsichord Treacle. Ahora viene el tercero, Sunshine Pops!, cuyo título ya te viene contando la historia. Un pop soleado, veraniego, feliz, que nació en otra época, unos cincuenta años atrás, allá cuando USA se empezaba a surfear y cuando el sueño californiano empezaba a nacer. Tiempos pasados... siempre fueron mejores, tiempos en los que no estuvimos pero que quisiéramos conocer, entre LSD con los Doors y submarinos amarillos con los cuatro grandes.

En fin, los Superimposers nos meten a la máquina del tiempo a lo largo de nueve temas que pasean entre glam ("Where Do You Go?"), folk psicodélico ("The Harbour Mystery"), playa y atardecer ("The Beach", "Sometimes", "Would It Be Impossible") y el más puro sunshine pop ("Tumbledown", "Four Leaf Clover"), con esas armonías vocales tan sesenteras, panderetas y el instrumento estandarte del género: el harpsichord, el piano más campirano y alegre que existe.

Un buen disco, señores, un pop actual que emana pasado por donde quiera, un pasado glorioso.

LO MEJOR DEL DISCO:


SEEING IS BELIEVING



THE HARBOUR MYSTERY



TUMBLEDOWN





La descarga se encuentra disponible en el Facebook del blog.

Solar Bears - Inner Sunshine (EP)

Hoy aprendí algo nuevo: en Irlanda existe buena psicodelia. De quienes aprendí la lección fue del dúo conformado por John Kowalski y Rian Trench, productores ellos, que se alistan para debutar el mes que viene con el LP "She Was Coloured In", el cual ya tiene el éxito cantado. ¿Cómo lo sé? Pues basta escuchar el adelanto que el par europeo viene ofreciendo, el cual dejará satisfechos por igual a electrónicos, experimentales y psicodélicos. Inner Sunshine, título irónico si tenemos en cuenta que su música parece explorar un complejo mundo interior, misterioso y atractivo.


Una línea de batería sencilla y otra de bajo conforman los cimientos sobre los cuales Solar Bears vuelcan su creatividad, añadiendo sonidos espaciales que colorean de a pocos el disco entero. Los arreglos y los cambios de ritmo, ésa parece ser la fórmula ganadora cuando de electrónica se habla y los Solar Bears la han descubierto; temas como "Trans Waterfall" o "Photo Negative Living" no me dejan mentir, donde, tras hacernos olvidar de que la gravedad existe, nos hacen aterrizar intempestivamente a punta de guitarras. Los cambios, loco, los cambios, siempre se trató de los cambios.

LO MEJOR DEL DISCO:

TRANS WATERFALL
:




La descarga se encuentra disponible en el Facebook del blog.

Antony and the Johnsons - Thank You For Your Love (EP)


Es difícil elegir las palabras adecuadas para retratar una realidad que quizá solo existe en el mundo de un tal Antony Hegarty, una suerte de paraíso que nace cada vez que este músico inglés se anima a cantar. Su voz ataca directamente a los nervios, conmocionándolos, volviéndolos frágiles y vulnerables; los acaricia lentamente hasta que, de pronto, los altera sin anestesia. Cuando despiertes de la experiencia Johnson, algo habrá cambiado: te sentirás más sensible y estarás adormecido por unos momentos; quizá no te hayas dado cuenta pero el sol habrá salido y por al menos un par de días serás una buena persona. Así me pasó.

Yo tuve la suerte de experimentar tal catarsis a través de uno de los himnos más reconocidos de la banda: "Hope There's Someone". Parecía que en el mundo no existiese más que un hombre y su piano, pues, en ese instante, nada más valía la pena. Ambos, tan cómplices, supieron hacerme llorar, y, mientras temblaba, tratando de callar mis lágrimas, agradecí. Los superpoderes sí existían. Luego de escuchar el tema antes mencionado ya no había marcha atrás, seguiría el disco completo y, con él, ese fenómeno ocasionado por Jean-Baptiste Grenouille y su perfume. Este se llamaba I'm a Bird Now y en él se confundían llantos de melancolía y felicidad, con temas que conmovían tanto por la pena intensa con que eran interpretados como por la esperanza que transmitían. Los había tristes y dulces, y la impresión que causaron fue muy fuerte.

Antes de que me llames exagerado, te someto a la prueba. Se llama Thank You For Your Love y es el EP previo al cuarto álbum de los ingleses, el cual llevará por título Swanlights y verá la luz recién en octubre. El adelanto contiene cinco temas, dos de los cuales son covers de Dylan y de Lennon, respectivamente: "Pressing On" e "Imagine". Ambos pudieron haber estado mejor, sobre todo "Imagine", pero lo que en verdad destaca, a mi parecer, son las otras tres canciones. Ellas muestran las dos facetas de los Jonhsons: alegría en "Thank you for love me"; tristeza en "My Lord my Love". Ambas cumpliendo el mismo objetivo del I'm a Bird Now: conmover o morir.

Los dos meses que faltan para la llegada del nuevo disco estarán cargados de ansiedad y un temor ya bastante conocido pues, de seguro, la historia narrada a inicios del post se repetirá. Ni modo pues, mis nervios tienen los días contados antes de ser sometidos una vez más a ese placentero martirio llamado Antony and the Johnsons. Por suerte contamos con un EP para ir preparando el terreno.

LO MEJOR DEL DISCO:

MY LORD MY LOVE



La descarga se encuentra disponible en el Facebook del blog.

The Walkmen - Lisbon

Si mal no recuerdo, es la primera vez que posteo algo tan "dulce" como lo es el más reciente disco de los americanos The Walkmen. Yo no estoy hecho para la música bonita, para unas tonaditas tranquilas que parecen llevarte de la mano por una cálida tarde veraniega ni mucho menos para el romanticismo hecho canción; sin embargo, con Lisbon, me quedé sin argumentos. ¡Qué música tan endemoniadamente empalagosa!


Aún me sorprende la facilidad con la que me rendí ante el disco y su declaración de amor, y me averguenza revelar que, en oídos de corte experimental y psicodélico, la insinuación melosa de un grupo de estadounidenses haya surtido efecto. Y todo gracias a la autenticidad con la que The Walkmen nos hace recordar que todos alguna vez fuimos adolescentes soñadores, ilusionados y enamorados, usando corazón antes que cabeza. Con Lisbon uno tiene que hacer eso, no pensar más y perderse en un atardecer playero con la otra mitad, recitarle cosas lindas al oído, acariciar sus cabellos... Ser un cursi afiebrado. Si no lo consigues con la primera canción, "Juveniles", no desesperes, puede que aún quede dentro de ti algún recuerdo quinceañero. Si luego de "Angela Surf City" sigue sin suceder nada, empieza a temer un poco que hasta a mí -uno de los principales enemigos del surf rock- me agradó la canción. Si para "Stranded", el tema más emocional del disco, tu corazón no se ha alterado, puede que no lo tengas.

Lisbon fue creado para sumergir a cada uno en una nube de los más puros sentimientos, con riffs altamente pegajosos que de a poquitos te regresionan a una etapa en que no eras más que un tontuelo enamoradizo con ganas de vivir más. Un gran respiro de ánimo para aquellos que envejecen más rápido que los demás.

P.D.: ¿No es como escuchar a The Libertines con una dosis extra de romanticismo?

LO MEJOR DEL DISCO:


STRANDED:


DESTACADOS:
* Juveniles
* Blue as Your Blood
* Woe is me

La descarga se encuentra disponible en el Facebook del blog.

Colectivo Circo Band - Pawaun!

Ellos hacen música como un complemento para funciones circenses; según boca de Luigi Valdizán, su saxofovocalista, es música de la calle, de barrio, del pueblo. Colectivo = unión de personas con diferentes estilos; circo = diversión, entretenimiento visual, chongo; band = saxofón, trompeta, guitarra, bajo, batería, teclados, trombón, tuba, QUÉ MÁS! Suena prometedor, y es que las bandazas numerosas están de moda. Con dos mujeres en su alineación, los peruanos se unieron como jugando, para jugar con los muchos géneros musicales que el país de los incas nos ha regalado: chicha, música criolla, folk, huaynos y el rico vals. Súmales jazz, vallenato, rock y polka, y estarás frente a un plato siete colores de esos que se sirven en las legendarias esquinas limeñas. Sale pa llevaaaar!

Su música es tan movediza y llena de matices que es inevitable atornillarse a la silla, uno con esto baila o baila, goza y goza. En julio de este año sacaron su primer disco, cuyo nombre expone justamente su esencia: Pawaun! Una palabra que suena a un golpazo pero de full vacilón, un porrazo de guitarritas con punteos saltarines y un bajo que aporta mucho, una explosión de colores y tan variados sabores que les ha valido el rápido reconocimiento de las masas peruchas. Colectivo Circo Band ha brindado un disco con el cual es imposible aburrirse y que tiene ese cada vez más presente peruanismo musical que tan bien queda; ellos son otra de esas agrupaciones que se han dado cuenta de que en el Perú hay tantas delicias que pueden ser convertidas en notas y, lo mejor de todo, lo hacen con ese espíritu jovial que nos caracteriza a nosotros, los blanquirrojos. Tengo el orgullo de ser peruano, pues, y soy feliz.

LO MEJOR DEL DISCO:

MANDOSKA y LA MÁS LINDA DE LAS FLORES



REEL PUBLICITARIO


La descarga se encuentra disponible en el Facebook del blog.

Arcade Fire - The Suburbs

Con Funeral se dieron a conocer, despertaron comentarios de gentes sorprendidas por algo tan distinto y tan apoteósico, y es que tener violas, cellos, acordeones y mandolinas en una banda rockera es casi contradecirse. Con Neon Bible mostraron otra cara, los "Neighborhoods" del debut fueron reemplazados por temas oscuros y tétricos, bastante introspectivos. Con "The Suburbs", los Arcade Fire trabajan otro concepto; inspirados en el lugar donde Win y William Butler crecieron, la decena de canadienses elevan la balla de un disco indie. Ahora se ponen melancólicos, recuerdan su infancia gris, la dura adolescencia, la hospitalidad de un amigable Texas; recorren pasajes de una vida americana en dieciséis piezas, un número difícil para un solo LP. Pero no te espantes, los dieciséis temas te cuentan una sola historia, acá nada aburre.

Es increíble como los Arcade Fire se inspiran... Toman una idea y esta se transfigura en lo que mejor saben hacer, con una voz que narra los episodios de una vida interesante. Con el primer tema, "The Suburbs", Win nos presenta el contexto: una familia que no era precisamente la más unida, los siempre infaltables conflictos enseñaban con el mal ejemplo. El telón se ha abierto señores. Sigue "Ready to Start" y los canadienses no hacen más que hablarnos con el alma, el pequeño niño empieza a despertar y decide vivir, ahora está listo para empezar. Los instrumentos aumentan la sinceridad de las palabras, ellos también sienten. Así seguiría "Modern Man" y "Rococo", con tonos sobrios y tranquilos, lo justo para calentar las aguas. La cosa revienta con "Empty Room", donde el violín entra en éxtasis y la voz de Reginne crea casi un himno. A partir de este momento, los Arcade Fire mostrarán toda la paleta de colores con los que nos pueden pintar el cielo.

La cantidad y la calidad de los arreglos en cada canción es exquisita, cada miembro de la banda sabe en qué momento dejar que su herramienta hable por él, y en más de un idioma: han aprendido algo más que pop barroco. Por momentos suenan a un rock distorsionado, como en "Month of May", en otros a folk, como en "Suburban War" o en otros simplemente a gloria; los maestros de Montreal saben que contar con un arsenal de músicos entre sus filas es, claramente, una ventaja con la que se pueden crear texturas diferentes todas entre sí. Pero los buenos momentos no pueden ser recordados si no acaban. "Wasted Hours" y "Deep Blue" son, quizá, las canciones más feeling del disco; el piano está triste y, junto al protagonista, empieza la despedida. Esto se ha acabado, pero el viaje nos queda en la memoria; un viaje por parajes tan detallistas, llenos de aire puro y lágrimas de alegría. Eso es "The Suburbs", un sublime viaje por la vida de un grupo de extraños que saludan al pasado en agradecimiento por la fuerza interna que les ha brindado; un concierto de temas llenos de espíritu y esperanza, donde está claro que las vidas fáciles no se sortean a menudo. Es cierto que los niños bonitos a veces no son más que eso.

Muchos dicen que "The Suburbs" es el "Ok Computer" de los canadienses, su "Automatic for the People"... Piensen bien en lo que dicen, puede que se estén quedando cortos.

LO MEJOR DEL DISCO:

La verdad, es una de las pocas y extrañas veces en que les traigo un buen disco compuesto de buenas canciones. Absolutamente TODAS son excelentes. De todas maneras, les dejo una muestra que los enganchará:

MONTH OF MAY



La descarga se encuentra disponible en el Facebook del blog.

Interpol - Interpol

Es usual que las nuevas bandas se den a conocer al mundo con discos homónimos, como gritando HEY, YO ME LLAMO AEROSMITH O FRANZ FERDINAND, ACUÉRDENSE DE MÍ. Si el disco es bueno, habrán logrado el reconocimiento; si aquel es malo, mejor que la banda ni se anime a sacar otro. El asunto es que esta regla ha sido recientemente rota con una banda de neoyorquinos que ha decidido prestarle su nombre recién a su cuarto LP. Se trata de Interpol y su nuevo disco que, la verdad, no me acuerdo como se llama. La pregunta es si valió la pena que su nombre fuera gastado en esta nueva entrega.


El disco homónimo pretende ser un equilibrio entre la introspección del "Our Love to Admire" y la fuerza del "Turn On the Bright Lights" a través de canciones con batería y guitarra más vivas, pero que guardan, a la vez, ese tono misterioso que los Interpol ya venían adoptando. Sin embargo, lo que pudo ser un gol se convirtió en un simple intento, pues las ganas de juntar ambos discos dejó al "Interpol" sin ser ni una cosa ni la otra. Banks ya lo venía anunciando cuando, tras afirmar que su cuarta producción se acercaría en estilo a la primera, dijo que no sería así, sino que la novedad presentaría un estilo mucho más clásico. ¿A qué se refería con esto? Creo que ni él lo sabe pues así lo demuestra el nuevo disco. El intento fue bueno pero se olvidaron de una sola cosa: dejar la linealidad. Se percibe más ritmo que en el "Our Love..." y aún está ahí la débil atmósfera oscura, pero nada se aprecia como debería ser si las cuerdas y los tambores entonan eternos "bis". El coro, en más de una ocasión, es lo que aleja a los temas de la completa monotonía.

Bueno pues, realicen el experimento ustedes mismos y dense cuenta de qué ha sucedido con los Interpol, quizá en ojos más fanáticos del cuarteto estadounidense mis palabras valgan menos de lo que pienso.


LO MEJOR DEL DISCO:


QUÉ DIFERENCIA CUANDO LE METEN CAMBIOS DE RITMO A UNA CANCIÓN.

DESTACADOS:

* Success
* Barricade

La descarga se encuentra disponible en el Facebook del blog.

Department of Eagles - Archives 2003-2006

En el mundo musical existe un axioma que nadie osaría siquiera cuestionar: todo lo que viene de Grizzly Bear es admirable. Francamente, aprendí esto recién el año pasado, cuando una sola canción de la banda estadounidense me mostró que en la música uno nunca llega a conocerlo todo. Cuando piensas que ya nada te puede llegar a sorprender vienen unos malditos genios y te cierran el hocico, y es que de vez en cuando la mamacha tierra nos premia con esos raros pero imprescindibles especímenes. Así son Daniel Rossen, Ed Droste y compañía, y así es "Ready, able", un tema orgásmico. Ahora, con la lección aprendida, ni bien vi aparecer por ahí las palabras Department of Eagles -el proyecto alterno que Rossen, el frontman de los Grizzly, ejecuta junto a Fred Nicolaus- mi hambre despertó: habían estrenado nuevo disco, "Archives 2003-3006", el quinto en su historial. Pero yo no te vengo a hablar de él, pues, tal como me sucedió con el Veckatimest de los Grizzly, una sola canción bastó para sobrepasar mis expectativas. Su nombre: "While we're young". Una maravilla forjada a punta de guitarras acústicas, apuradas ellas por las ágiles manos (que ya quisiera tener) del dúo americano y por sus instrumentos más poderosos: las voces. ¡Por qué coño me gustan tanto! Esos susurros entremezclados con sube y bajas en falsetos me fascinan, me emocionan, me generan adicción.



El tema tiene el balance exacto entre calma y fuerza que lo convierte en una fórmula segura de éxito: por un lado, la suavidad de la voz de Rossen y el ulular que junto a la de Nicolaus regala a la atmósfera, y, por otro, esa explosión de la batería, emitiendo sonidos de marcha, y la rapidez con que los riffs de guitarra fluyen a lo largo de los segundos. Es una gran paja que mis oídos se han manufacturado, una como hace tiempo no tenían y que lastimosamente los dejó tan agotados como para seguir escuchando las otras diez piezas que el dúo formado en Nueva York entrega junto a "While we're young". Sin duda la maginificencia del tema antes mencionado opacó a todos los demás ya que a mis oídos, por cansancio o sinceridad, solo los movieron un par de canciones más: "Deadly Disclosure" y "Brigthest Minds". La primera tiene esa melancolía tan atractiva que el folk produce, mientras que la segunda presenta a la batería nuevamente acelerada, platillos salteados y pandereta agitada, concluyendo así que, cuando Rossen y Nicolaus le meten segunda a sus temas, las cosas van mejor. Los demás, la verdad, me duermen un poco, y aunque tienen elementos interesantes, la droga que Department of Eagles me sirvió con "While We're Young" será difícilmente superada.

En fin, un disco no es bueno si solo tiene tres temas rescatables, pero cuando uno de ellos vale por diez, qué carajos importa. Luego de creaciones tan maravillosas como las ya comentadas, Rossen se puede dar el lujo de hacer cualquier porquería; se puede meter de reggaetonero si quiere, pero eso sí, que no se olvide de regalarnos, de vez en cuando, otro de esos orgasmos musicales únicos. Al menos uno por disco, ¿sí?


GAYNGS - Relayted


Raperos, cantautores folk, electrónicos, jazzistas, psicodélicos, fulano, mengano y sultano. Son 23 los individuos, 23 los mundillos que se entrecruzan y se aparean, son GAYNGS, señores, uno de los proyectos más ambiciosos y megaelaborados de las últimas centurias.

Engendrado por el desconocido (por mí) Ryan Olson y alimentado por nombres de alcurnia como Bon Iver, The Rosebuds o Rhymesayers, el abarrotado grupo ha debutado con el LP "Relayted", una obra que sorprende (aunque no muy favorablemente) por la multiplicidad de personalidades que muestra. La inverosímil mezcla de músicas adopta su forma gracias al molde del soft rock, el cual le presta letargo y un par de toneladas a la batería y al bajo, los más indicados para crear la atmósfera base. Será sobre esta pareja de instrumentos que la veintena de músicos empezarán a jugar. Al escuchar las tres primeras canciones, pude definir a Relayted de una manera sencilla: uno de esos discos con los cuales uno se relaja y se toma un whisky on the rocks con un par de delfines de hielo, perfecto para poner en una reu amical; hartas dosis de soul, jazz y uno que otro hálito de hip hop; cero psicodelia, cero locura. Era refinado, sí, elegante y diferente a mi estilo. Me gustaba. Pero un loco, aunque se vista de seda, loco se queda: la música con mucha clase no va conmigo. Yo necesitaba cambios y no será sino hasta la cuarta canción, "No Sweat", que lo que ya empezaba a aburrir iba a mostrar algo diferente: quién más que el piano, iniciando a lo grande e imprimiendo después una ligerísima sombre de psicodelia.



En la quinta canción, "False Bottom", Relayted muta sorprendentemente: se pierden un poco las formas, el bajo se descontrola y la locura se va haciendo presente. El disco ahora gritaba mi nombre.



Sin embargo, la siguiente canción, "The Beatdown", se encargaría de ahuyentar mis expectativas con un cambio de ritmo horrorosamente radical, luego de dos minutos de lo que para mí era la canción más fuerte del disco. Pareciera que alguno de los 23 músicos no estuvo de acuerdo con el movimiento que "The Beatdown" aportaba al disco, le tuvo miedo a experimentar un poco más allá de sus narices y saboteó a su creador, destruyendo así el salvavidas que la canción antes mencionada le arrojaba al disco entero para no verse ahogado en el aburrimiento. Vaya, pues, parece que tener tantos miembros en la banda puede ser contraproducente, cosa que "Crystal Rope" parece reafirmar a los 2:50, con esa bipolaridad de estilos tan desgraciada. El cambio ahora me produjo arcadas y ya no cabía la más mínima duda: los GAYNGS la cagaron completamente. Creo que la aventura había terminado. Los temas que siguen regresan al conocido delay retro de la batería y al estilo que parece predominar a lo largo del disco, algo que llamó la atención allá por la canción número uno pero que a estas alturas se encarga de contar historias conocidas. El antepenúltimo tema, "Faded High", reavivó mis esperanzas por unos minutos al notar que la batería se aceleraba y los GAYNGS se escapaban de la lentificada rutina; sin embargo, otro cambio radical la devastó. No quiero hablar más del tema.

¿Qué sentir con este disco? La verdad, no sé si me gustó. El proyecto superpoblado, a mi parecer, no justificó debidamente el peso que los nombres de sus integrantes aportó, dejando muchas canciones mutiladas, a punto de convertirse en verdadera gloria para la banda. El hecho de tener tantos integrantes jala miradas y aumenta la cantidad de descargas, ansiosas por convertir a los melómanos en testigos de la más grande orgía de géneros musicales, estilos e influencias. En algunos tracks vale la pena la muchedumbre, en otros, mucho ayudan los que poco estorban. En todo caso, Relayted queda como una experiencia que nos brinda la oportunidad de cambiar el indie rock, las guitarras punteras y, por qué no, los sintetizadores, por unos ritmos sutiles y más reposados; pero que también nos da la oportunidad de ver la eterna pelea entre 23 mentes que decidieron crear su disco personal. Lástima que se olvidaron que todos ellos debían sonar como uno solo.

Difícil tarea la de unir a gente tan dispar como esta, ¿no crees?


ENTONCES, ¿LO MEJORCITO DEL DISCO???

THE GAUDY SIDE OF TOWN

LA BIENVENIDA DEL DISCO, UN TEMA MUY BUENO.

La descarga se encuentra disponible en el Facebook del blog.