Voltaje Marciano!

"La mejor banda de rock progresivo", según la revista Rolling Stone (2008), regresará a las tablas este año para presentarnos su nuevo disco de estudio, con un nuevo nombre raro y el estilo extraterrestre al que nos tienen (mal) acostumbrados. Ya te habrás dado cuenta que estoy hablando de The Mars Volta y su quinto álbum, Octahedron, próximo a salir el 23 de junio.

Uno de los motivos por los que coloqué comillas a la frase con la que inicié este post, es precisamente porque las reglas de ortografía indican que así debe ser cuando se trata de una cita; sin embargo, el motivo principal por el que hice uso de este accesorio lingüístico, fue mi deseo de expresar una ironía. Quizá yo sea uno de los pocos que piense que este título les queda grande, pues incluso habiendo demostrado su eclecticismo y su locura, semejante a la que producen por un momento las más bizarras drogas alucinógenas, suenan demasiado desordenados para mi gusto. Son como un par de adolescentes que por fin cumplieron el sueño de tener su bandita de música, y en su intento de crear esa pieza maestra con la que todos los nóveles sueñan, hacen precisamente lo contrario: una avalancha descomunal de ruido totalmente amorfa. Si bien antes creía que los Mars Volta tenían un estilo extraño y un poco aturdidor, luego de haber escuchado el disco que lanzara este año su guitarrista principal y productor, Omar Rodríguez, a estas características se sumaron un par más: desesperante y ensordecedor. ¡Pero qué cosa tan fea! Post antes hablé de lo que a mi parecer es el mejor disco editado en lo que va del año, y ahora ya saben cuál es el que considero peor. Pero bueno, entre tanta crítica deconstructiva hacia el disco de este multi-instrumentalista puertorriqueño, rescato algo bueno: su nombre.

En fin, tras haberme desahogado del desencanto producido por la bulla solista del músico antes mencionado, me toca hablarles del single recién salido del horno del grupo al que pertenece. Se llama "Cotopaxi" y su nuevamente raro nombre significa "cuello de la luna", en una lengua ecuatoriana. Su sonido es como el de siempre, y felizmente no llega a ser tan perturbador como el que recientemente nos ofreció su frontman. No son santos de mi devoción, pero este single es respetable. A ver que piensan!


COTOPAXI


0 posesos comentando:

Publicar un comentario